En el año 1975, una brigada blindada del ejército marroquí, con ganas de armarla, invadió 5 km de la frontera norte del Sáhara Occidental, entonces provincia española. Esto originó un movimiento de tropas y una verdadera guerra de perfil bajo, que finalizaría con la Marcha Verde. Se mantuvo en secreto por la grave enfermedad del general Franco y el temblor de piernas de los que estaban a su alrededor.

Yo estaba allí haciendo el servicio militar. Conocí a dirigentes del Frente Polisario, a un agente especial del Servicio Secreto del ejército y a mercenarios de gatillo fácil integrados en la Legión para el trabajo sucio. Así que, sin darme cuenta, ejercí también de gratuito informador doble. Para liarme todavía más me casé en mitad de aquel torbellino.

Fueron aquellos unos momentos complicados, pero apasionantes de vivirlos en primera fila. Yo doy testimonio de circunstancias desconocidas sin saber del todo hasta donde llegaban y lo que significan. Aunque sí sé que se perdió la ocasión de una hermosa nación y yo perdí unos valientes amigos y un sobresaltado amor.

Una Odisea en un mar de arena, donde se dan cita el espíritu de aventura, los miedos del soldado en la trinchera, el millón de estrellas vivas en la noche, la amistad verdadera, el amor sin fronteras y el deseo de volver a casa.